Definición de vendaje

Los vendajes son los procedimientos o ligaduras hechos con tiras de lienzo u otros materiales con el fin de envolver una parte lesionada del cuerpo humano. Hoy en día, la fisioterapia ha sobrepasado con creces esta definición clásica, consiguiendo aplicar vendajes en muy diversas patologías y con muy diferentes funciones. Desde un vendaje de drenaje linfático, hasta un vendaje neuromuscular, pasando por los vendajes funcionales, el conjunto de indicaciones de éstas técnicas es amplísimo y, por mucho que su realización parezca muy sencilla, desde fisioterapia online os recomendamos que solo os pongáis en manos de profesionales de la fisioterapia a la hora de recibir este tipo de tratamientos.

A continuación veremos:

  • Vendajes funcionales
  • Vendaje del muñón de amputación
  • Vendaje compresivo del linfedema
  • Vendajes neuromuscular

Vendajes funcionales

Son vendajes que se utilizan tanto de manera terapéutica como preventiva. Se basan en la inmovilización parcial de una determinada articulación, o varias de ellas, permitiendo parte del recorrido articular. Se utilizan en lesiones ligamentosas, musculares o tendinosas de caracter leve o moderado, para favorecer la recuperación de la lesión.

Una de las principales ventajas de estos vendajes es que evitan los efectos adversos de la inmovilización total (limitación del movimiento articular, pérdida de fuerza muscular...).

La característica fundamental es que coloca los tejidos lesionados en posición de acortamiento, disminuyendo su tensión, mientras permite que el resto de planos de movimiento sigan siendo libres.

Su única contraindicación son las lesiones graves que requieran una inmovilización total o la alergia a alguno de los materiales que se utilizan en su realización (por ejemplo, muchas tiras de tape contienen látex).

El material para su realización es muy amplio y variado, aunque los más habituales son las vendas inelásticas (tape) y las vendas elásticas, de diferentes anchuras.

Vendaje del muñón de amputación

En el caso de miembros amputados, el fisioterapeuta realiza vendajes con varios objetivos.

El primero de ellos es la modelación del muñón, para darle la forma correcta y que se pueda adaptar de manera idónea al uso de la prótesis. Se busca habitualmente que el muñón tenga una forma cónica, liberándose de la inflamación y el edema postquirúrgicos. Se suele esperar a la retirada de los puntos y a que el muñón haya cicatrizado internamente para comenzar a realizar este tipo de vendaje.

Un segundo objetivo es el correcto posicionamiento del muñón, evitando contracturas musculares viciosas que dificulten la posterior protetización. Por ejemplo, en un amputado de muslo el vendaje debe evitar que la cadera tienda a la flexión, para que el encaje de la prótesis pueda luego colocarse de manera correcta.

Vendaje compresivo del linfedema

El linfedema es la acumulación de líquido en el espacion intersticial por causas linfáticas, como por ejemplo tras una estirpación de mama o tras radioterapia

Una de las partes más importantes de la fisioterapia en estos casos, además del drenaje linfático manual, es el vendaje compresivo para la evacuación de este edema. Se realiza con vendas de algodón, habitualmente cohesivas, y trozos de espuma. También se pueden usar medias de algodón.

Sus funciones son evitar la acumulación de líquido, al disminuir la filtración capilar mediante la compresión, y disminuir la fibrosis característica de estos casos. Su principal inconveniente es que es un vendaje muy aparatoso, que puede llegar a interferir en la actividad diaria o laboral del paciente.

Vendaje neuromuscular

Es un tipo de vendaje cuyo uso se ha popularizado mucho en los últimos años.

Se basa fundamentalmente en la utilización por el fisioterapeuta de unas vendas diferentes a las habituales. Fabricadas en algodón, están pretensadas (un 10% aprox.) y adheridas a un papel protector. Tras la retirada de este papel, se pueden estirar aún un 40-60% más en sentido longitudinal, siendo inelásticas en sentido transversal.

La superficie de apoyo sobre la piel no es simétrica ni longitudinal, sino que presenta ondulaciones en forma de S, lo que contribuye a "levantar" la piel, consiguiendo un aumento de espacio y por lo tanto un mayor flujo sanguíneo a la zona.

Es perfectamente compatible con los vendajes anteriores.